Los Lusitanos y Vettones habitaban las tierras de Centro-Occidente de Hispania.
El territorio corresponde al que ocupa la cultura denominada de “los verracos” que se desarrolla a partir del Siglo V. a. C. como una evolución de la que existía a finales de la Edad del Bronce, llamada cultura de las “Cogotas I”. Recibe este nombre por el Castro de las Cogotas, en la provincia de Ávila. Uno de los aspectos más conocidos de esa cultura son los recipientes cerámicos, característicos por su buena factura y su abundante decoración.
El asentamiento de los Vettones se produjo entre los ríos Duero y Tajo, principalmente en el territorio de las actuales provincias de Salamanca, norte de Cáceres, Ávila, Zamora y Toledo.
Los Lusitanos se asentaron en las zonas también cercanas a los ríos Duero y Tajo en lo que hoy se conoce la región de Beira y Extremadura, en el área central de Portugal y en la región de Extremadura en España.