El asentamiento autrigón de Cerro Milagro y su territorio de explotación

La investigación en el cerro El Milagro, localizado al noroeste de Poza de la Sal, tiene como objetivo abrir futuras vías de trabajo que permitan conocer la secuencia de ocupaciones en este espacio, desde la Edad del Hierro hasta la actualidad.

En este lugar se situaría la ciudad autrigona de Salionka, citada por el autor clásico Ptolomeo, lo que demuestra su importancia en el mundo antiguo, y que hoy forma un complejo arqueológico de notable interés, con los yacimientos de El Castellar sobre el diapiro salino, y la ciudad romana, posiblemente Flavio Augusta, junto al río.

La importancia de la explotación de la sal (el oro blanco de la antigüedad) ha dejado una profunda huella en el diapiro desde la Prehistoria hasta la actualidad. Los periodos mejor documentados son la Segunda Edad del Hierro (siglos II-I antes de Cristo) y el romano (altoimperial y tardorromano), cuando se ocuparon las terrazas orientales del cerro y la zona del valle hasta el río Homino. La ocupación durante el periodo hispano-visigodo, aunque atestiguada, se define con mayor dificultad.

La fotografía aérea y una intensa prospección de la superficie han sido la clave para determinar tanto la extensión del poblado, como el proceso de ocupación de las terrazas a lo largo de la antigüedad. Se ha confirmado además el alto valor simbólico y sacro que tuvo el poblado por la presencia de un lugar singular: el podio de predicción calendárica de los solsticios. En el cerro se conservan también algunas evidencias de su fortificación, sin que sepamos aún si estas se extendían por todo su perímetro. Las modificaciones que ha sufrido este espacio, tanto por la propia ocupación como por su acondicionamiento para el laboreo agrícola, denotan la intensa antropización del Cerro del Milagro y dificultan en parte la reconstrucción de su topografía original.