Desde finales del siglo XX, en el ámbito occidental se está trabajando en el campo de la mejora de la regulación, con el objetivo de conseguir simplificar y racionalizar el entorno normativo.
La experiencia ha demostrado que la inversión en la mejora de la regulación multiplica el rendimiento de las políticas públicas que se implementan desde las Administraciones Públicas.
Por su parte el derecho a una buena administración consagrado en el art. 12 del Estatuto de Autonomía de Castilla y León, aprobado por Ley Orgánica 14/2007, de 30 de noviembre, de reforma del Estatuto de Autonomía de Castilla y León, debe ponerse en relación con el principio rector del crecimiento económico recogido en el art. 16 del mismo texto, lo que origina que la Junta de Castilla y León haya asumido como propia la necesidad de elaborar normas basadas en criterios de calidad normativa y se comprometa igualmente con el objetivo de garantizar una implementación más eficaz de las políticas públicas, que provea de mas y mejores servicios a la comunidad.
Por todo ello se ha elaborado un Manual de Calidad Normativa en el que se especifican los principios y criterios que han de seguir los centros directivos para la elaboración y revisión de las disposiciones normativas, con el objeto de garantizar el estudio de los posibles impactos en las políticas públicas y que no se generen cargas administrativas innecesarias e injustificadas.
Basándose en un sistema de autoevaluación y preguntas/respuestas, este Manual quiere constituirse en apoyo a los servicios que elaboran las disposiciones normativas o que instruyen sus procedimientos.